Era una tarde de noviembre. Yo era pequeña y había llegado de visita con mis abuelos a una antigua casa en las afueras de la ciudad. Mientras los adultos conversaban en el living me puse a recorrer el lugar. Cual grande fue mi sorpresa al encontrar un precioso piano en uno de sus rincones. Tímidamente pregunté si lo podía tocar. Al recibir respuesta afirmativa, levanté su tapa y mis dedos comenzaron a jugar con los sonidos. Las melodías dibujadas en el aire quizás no eran gran cosa pero a mi me fascinó el encuentro con el sonido, con esa magia que se produce en el hombre cuando entra en contacto con sus más profundas emociones. Por otra parte, gracias a mi madre que me cantaba con mucho amor y alegría, pude descubrir lo hermoso que es expresarse a través de ese instrumento único que es la voz, cómo cantar también nos libera y conecta con algo que se escapa a nuestra comprensión.
Quedé enamorada, maravillada, mi vida ya no sería la misma. La música me había tocado, conmovido tanto hasta sentir que sin ella no podría vivir. Quien pudiera ser como esos maravillosos músicos y tocar esas piezas llenas de magia, que nos transportan y nos llevan hacia otros universos.
Esta historia, un poco resumida, forma parte de mi historia con la música. Si bien, no fue hasta la edad de 20 años en que comencé a estudiar piano, estuve mucho tiempo conectada con ese gran arte a través de la danza, la cual también adoro.
Es por eso que recomiendo que los niños comiencen a una temprana edad a aprender música. Comenzando con una iniciación musical y luego ya mas grandes, con un instrumento.
Aquí les comparto razones por las cuales llevar a tus hijos a estudiar música:
1- La música está presente en nuestra vida como algo natural desde que somos bebés. ¿Por qué perder ese desarrollo humano tan vital, que nos enriquece como personas y que todos tenemos derecho a tener? Como toda expresión artística, permite al ser humano expresarse, es muy saludable hacerlo y nos llena de alegría
2- Los niños que poseen educación musical desde pequeños, tienen un mejor desenvolvimiento en el aprendizaje de lecto-escritura.
3- Al crear, al estudiar, ponerse metas y ver los avances les fortalece la autoestima y la confianza en si mismos.
4- Es una excelente manera de compartir con los demás.
5- Contribuye a adquirir una mayor sensibilidad ante el mundo que lo rodea
6- Ayuda a aprender a escuchar, a compartir, a aceptar el tiempo propio y el de los demás y a ejercitar la paciencia.
7- Los mantiene ocupados en una actividad productiva y constructiva en vez de ver tanta televisión o tantos videojuegos. Y puede llegar a constituirse en una profesión en el futuro.
8- Alimenta la capacidad de concentración y coordinación.
9- Según Eliot Eisner, profesor de Arte y Educación de la Universidad de Stanford,
la música ayuda a desarrollar un juicio crítico y la habilidad para crear cosas “bellas, expresivas y únicas” y, además, “proporciona a los jóvenes la posibilidad de trabajar con la ambigüedad y oportunidades para aprender a explorar lo que no está reglado, poniendo énfasis en lo bueno”.
10- Porque es maravilloso y es impagable lo que se siente al hacer música, ya sea cantando o tocando un instrumento. Nos permite disfrutar, volar con la música, fundirse con ella y lograr expresar lo que palpita en lo más hondo de nuestra alma.
Hay muchas actividades que se pueden hacer: aprender un instrumento, ir a un coro son actividades maravillosas y muy estimulantes. Lo esencial es que ellos tengan ganas, que no sea una imposición de los padres para realizarse a través de los hijos sin evaluar realmente cual es el verdadero interés de los pequeños. Si es así, las clases no llegaran a buen puerto. Es mejor no forzarlos, sino se conseguirá lo opuesto.
Paola Depetris dice
me encanta! es la pura verdad!
Paola Romero dice
Te comento que fue algo parecido el motivo al cual me enamore de la música también, vi un piano grande y alguien lo empezó a tocar, y escuche esas hermosas notas que este producía, y desde allí pedí estudiar música, lo empece a mis 10 años y si que me encanto, estuve en grupos corales (aun nadie lo sabe, pero creo que ahora si jejeje). Y si comparto contigo que es muy bueno que los niños se introduzcan en este arte, estoy esperando que el mio cumpla los 5 años e inscribirlo.
Maria Beas De Bonilla dice
Que bien, me encanta el violin y la guitarra.